¿Cómo afecta el asma mi calidad de sueño?
¿Te despiertas tosiendo o con dificultad para respirar? No estás solo. Casi el 75% de las personas con asma experimentan síntomas nocturnos al menos una vez por semana, lo que hace que sea difícil descansar bien. Esto es especialmente importante para los residentes del sur de la Florida, donde las temperaturas cálidas, la humedad y los alérgenos en interiores pueden afectar el asma durante todo el año.
Si eres uno de los muchos pacientes con asma en el sur de la Florida que lucha contra los síntomas nocturnos, ¡esta guía es para ti! Sigue leyendo mientras explicamos cómo el asma afecta el sueño, cuáles son los desencadenantes nocturnos más comunes y qué tratamientos comprobados pueden ayudarte a ti (o a un ser querido) a respirar—y dormir—mejor.
¿Por qué el asma empeora por la noche?
Los síntomas de asma a menudo se agravan durante el sueño por una combinación de factores. Cuando el cuerpo está acostado, a los pulmones les cuesta mas expandirse por completo. Además, por la noche, la producción de cortisol (una hormona antinflamatoria natural) disminuye, lo que puede aumentar la inflamación de las vías respiratorias. Si a eso se le suman los desencadenantes ambientales, se tiene la receta perfecta para un episodio de asma nocturno.
Desencadenantes comunes del asma nocturna:
- Acaros de polvo en almohadas y colchones
- Caspa de mascotas en la ropa de cama
- Aire frío y corrientes de aire en el dormitorio
- Goteo posnasal o reflujo ácido durante el sueño
- Asma mal controlada en general
Todos estos factores pueden estrechar las vías respiratorias, lo que provoca sibilancias, tos o dificultad para respirar—haciendo que dormir bien sea complicado.
¿Cuáles son las señales de que el asma está afectando mi sueño?
Reconocer las señales del asma nocturna es el primer paso para un mejor manejo. Los problemas de sueño relacionados con el asma no siempre se manifiestan como un ataque completo de asma. A veces, los síntomas son sutiles o se confunden con otros trastornos del sueño.
Señales de advertencia comunes:
- Tos o sibilancias frecuentes por la noche
- Despertarse con dificultad para respirar o necesidad de usar el inhalador
- Sentirse inusualmente cansado durante el día
- Ronquidos o inquietud durante el sueño
- Problemas para conciliar el sueño o permanecer dormido
Los niños con asma también pueden presentar cambios de comportamiento, como mayor irritabilidad o dificultad para concentrarse en la escuela debido a la falta de sueño.
¿Cómo afecta el mal sueño al control del asma?
La falta de sueño de calidad puede debilitar el sistema inmunológico, aumentar las hormonas del estrés y causar inflamación—todo lo cual puede empeorar los síntomas del asma.
Con el tiempo, el mal sueño puede provocar más episodios de asma, menor función pulmonar durante el día, uso más frecuente del inhalador y/o una menor calidad de vida debido al cansancio e irritabilidad.
Si el asma afecta el sueño más de dos veces por semana, puede ser momento de reevaluar tu plan de acción con un especialista en asma o un alergólogo certificado en los condados de Miami-Dade, Palm Beach o Broward.
Consejos para mejorar el sueño con asma
Mejorar el asma nocturna comienza con un mejor control de los síntomas y algunos ajustes en el estilo de vida. Estos consejos pueden ayudar a reducir los síntomas y apoyar un sueño reparador:
- Mantén tu dormitorio libre de alérgenos.
Usa fundas a prueba de alérgenos en almohadas y colchones, lava la ropa de cama semanalmente con agua caliente y mantén a las mascotas fuera del dormitorio. Un purificador de aire HEPA y niveles bajos de humedad también pueden ayudar a reducir la exposición al polvo, la caspa y el moho durante la noche. - Sigue con tus tratamientos diurnos para el asma.
Sigue tu tratamiento recetado, incluso si los síntomas son leves. Controla la función pulmonar con un medidor de flujo máximo, evita los desencadenantes comunes y habla con tu proveedor si usas frecuentemente tu inhalador. - Crea una rutina nocturna favorable al sueño.
Evita comidas pesadas y cafeína antes de dormir. Eleva la cabeza si experimentas goteo posnasal o reflujo, y toma los medicamentos de control por la noche si así te lo indican. Una rutina calmada como leer o respirar profundamente también puede ayudar. - Lleva un diario de sueño y síntomas de asma.
Registra tus síntomas nocturnos, el uso del inhalador y la calidad del sueño. Llévalo a tus citas médicas para ayudar a tu alergólogo a identificar patrones y ajustar el plan de tratamiento si es necesario.
¿Cuándo debo ver a un especialista en asma?
Si el sueño se interrumpe constantemente por síntomas de asma o los remedios de venta libre no ayudan, es hora de consultar a un especialista en asma y alergias certificado. Estos médicos pueden realizar pruebas de alergias y asma para evaluar tu control del asma y ofrecer tratamientos personalizados. Para algunos pacientes, se pueden recomendar opciones como terapia biológica o inmunoterapia para reducir la inflamación a largo plazo.
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